domingo, 13 de enero de 2008

Philip K Dick, Sueños y Realidad


Escena de "Blade Runner"


“Reality is that which, when you stop believing in it, doesn’t go away.”– VALIS (1979)


Sueño de Agua

Hace una semana más o menos tuve un sueño un tanto extraño, lo cual no es decir que los sueños suelan estar ambientados en escenarios comunes y corrientes, más bien lo contrario, ¿no? El sueño iba más o menos así: me encontraba en un mundo paralelo. Se trataba del mundo donde se crea el agua. Ni más ni menos, este era el lugar donde todo lo referente al agua trata. En realidad todo lo que veo es que estoy en un edificio, como si de una dependencia gubernamnetal se tratara, con oficinas, empleados, departamentos, todos aquí tratan de la creación, distribución y administración del agua.

Un empleado me da un tour por la dependencia. Me explica el funcionamiento, los métodos, la administración del agua. En un momento dado, me pasan a una gran sala donde se encuentra el Creador del Agua. Se trata de un ente que está dentro de un gran tanque o algo que parece un tanque, y sé que el ente tiene conciencia, que es poseedor de sabiduría, que "piensa", pero yo lo que veo es un gran tanque. El Creador del Agua me habla, me dice cosas, entre ellas me habla sobre su gran responsabilidad de crear el agua, me habla de lo difícil que es, me explica que las cosas, en específico la relación entre el hombre y el agua, van a empeorar, me dice que no es culpa suya, sino que más bien es así como las cosas tienen que ser.

Luego me decía que me iba a revelar algo sumamente importante, yo me ponía un tanto nervioso, a la expectativa de escuchar algo que cambiaría mi vida sobremanera. El ser bajó su voz, si es que hablaba, yo no sé cómo era que lo escuchaba, y sus susurros me llegaron a mi mente, y así como me llegaron, así se esparcieron, como agua precisamente, en mi mente. Me desperté, ni más ni menos, en ese preciso instante, un poco alterado, pero al final me dí cuenta que lo que fuera que me haya dicho, que no eran palabras, sino más bien lo podría describir como sentimientos, me hicieron sentir una gran melancolía que, de manera peculiar, no me puso triste sino más bien sólo me insertó en el corazón un dejo de livianidad muy extraño, que me duró una buena parte de la mañana, durante la cual me transporté por mi día como habitualmente, llevando en la cabeza un sentido de haber experimentado algo especial.









Philip K Dick

Este el nombre de un escritor de ciencia ficción norteamericano que se volvió mundialmente famoso cuando Ridley Scott adaptó su novela "Do Androids Dream of Electric Sheep?" para crear la famosa película llamada "Blade Runner", que se volvió un clásico del género. Hollywood le ha rendido tributo (o explotado su obra ya que él murió más bien pobre y miserable) adaptando varias de sus obras para producir películas tan diversas como, "Minority Report", "Total Recall" (protagonizada por el Governator Scharzenegger), y últimamente es el caso de "A Scanner Darkly" (un nombre super chingón diría yo), de Richard Linklater, con Robert Downey Jr., Keanu Reeves, Woody Harrelson, etc. A Linklater se le conoce por otra obra suya, llamada "Waking Life", otra peli memorable (entre otras cosas por la manera en que está animada), y que toca temas semejantes a "A Scanner Darkly", en suma, la delgada línea entre lo que percibimos como realidad por un lado, y los sueños, la muerte o la alucinación por otro.

Más o menos al mismo tiempo que tuve el sueño del Creador del Agua, me topé con un documento que analizaba de manera un tanto interesante la vida y las visiones de Dick (http://www.techgnosis.com/pkdnet.html). El leer este documento despertó un interés en la vida de Dick que no para de sugerir e inspirar ideas, y que de alguna manera me referenció a ese sueño raro que tuve.

Me explico: Philip K Dick sufrió, durante su vida, una serie de alucinaciones que interesantemente, nunca se pudo explicar, y que se le atribuyeron a su padececiemiento de esquizofrenia. Sin embargo, estas alucinaciones y/o enfrentamientos con una supra o infra realidad, fueron, para bien o para mal, las que le dieron forma a su obra literaria.

Si vieron la película de "The Matrix" (película que se inspiró mucho en la obra de Dick), entonces se podrán hacer una idea de algunos de los preceptos centrales detrás de la obra de este autor, más en concreto, la percepción (errónea) de lo que es la realidad, el vivir en la paranoia, y el subsecuente desmoronamiento de esa realidad mal interpretada por los sentidos.

Las complicadas y fascinantes alucinaciones que Dick sufrió fueron desencadenadas, según él, por un extraño encuentro ocurrido en 1974. A Dick le habían sustraído una muela del jucio y tenía un dolor muy fuerte ya que no contaba con analgésicos. Su esposa los encargó por teléfono y una chica fué a entregarlos a su domicilio. La encargada de llevarlos era, según Dick, la portadora de un collar con un pendiente en forma de un símbolo llamado ichtus, dos líneas curvas que forman el contorno de algo parecido a un pez. Este símbolo era usado por los primeros Cristianos.

Este aparentemente inocente encuentro desencadenó una "gnosis", que, según creía Dick, le reveló una "memoria celestial", algo que está escondido en nuestro DNA y que, para no hacer el cuento muy largo, le llevaron a alucinar visiones sobre la vida de un Cristiano de la primera era, y sentir inclusive que llevaba el espíritu de un hombre que vivió en esa época, además de escuchar voces provenientes de aparatos de radio, televisión, ver luces de colores que le hablaban, etc.

Si bien uno podría descalificar sus alucionaciones como algo esperado de un esquizofrénico y adicto (Dick fue adicto a las anfetaminas), sus ideas no bordan en lo ridículo ni mucho menos, sino que son un extenso conjunto de ideas sobre la percepción de la realidad, sobre el papel que juega el hombre común ante los poderes políticos que dirigen y controlan su vida, la religión y la tecnología en nuestro congestionado mundo, etc. Por otro lado, si bien sus ideas fueron convulsionadas y desordenadas, Dick precisó simpre que los atisbos intermitentes a la realidad se darían siempre de manera sutil, en aquellos pedazos de información que son desechados por comunes; encuentros casuales, sueños, signos, lo que le hable al inconciente, sin dejar nunca que nuestras creencias se interpongan a aquellos "mensajes" ocultos. Suena a paranoia?, quizá lo es, pero según Dick, la sorpresa es un antídoto para la paranoia.

Extrañamente, entre las alucionaciones que tuvo Dick, hubo una en la que una luz de color rosa, que se le apareció de repente mientras escuchaba "Strawberry Fields Forever" (en serio, eso afirmó Dick toda su vida), le reveló que su hijo estaba enfermo y que moriría si no lo trataban pronto. Efectivamente, resultó que su hijo estaba enfermo, que tenía una hernia que lo pudo haber matado. ¿Qué tal?

Escépticos o no, lo que si es verdad es que una de las ideas más interesantes de Dick no tenían que ver para nada con alucinaciones, luces rosas, naranjas ni amarillas, sino con política. Toda su vida fue un radical que sospechaba de los poderes fácticos y de las empresas multinacionales que han convertido a nuestro mundo diario en logotipos e ideas sobre lo que necesitamos, lo que debemos temer, comprar, vestir, leer, mirar, y hasta soñar.

En eso, si no es que en otra decena de cosas más interesantes de las que vale mucho la pena escribir, radica algo por lo que se le sigue admirando a este alucinado paranoico adicto que se llamó Philip Kindred Dick.

No hay comentarios.: